miércoles, 5 de octubre de 2011

Los Conflictos de Interés en America Latina

“Es el egoísmo del panadero, 
el que lleva el pan a la mesa del obrero”
Adán Smith.

Quienes creen en esta idea asumen que el conflicto de intereses es inevitable y proponen un modelo de operación y pacto social, que a pesar de lo negativo que representa el egoísmo o interés, lo aproveche, consiguiendo así –aparentemente- que un “mal” (egoísmo) se trasforme en un limitado “bien” (oferta de bienes y servicios) pudiendo haber sido mejor, sin egoísmo (sin intereses), por ejemplo.



America Latina esta llena de casos típicos…
En America Latina, el conflicto de intereses es una cruda realidad. Un ejemplo, es el caso de Sebastián Piñera, presidente de Chile, quien como ciudadano chileno tuvo todo el derecho como cualquier persona a aspirar a un cargo de elección popular, aunque también es cierto que alcanzando la presidencia ha pasado a ser una persona que concentra fuertemente lazos con el poder económico y detenta la primera magistratura política del país, tanto así que solo para mencionar el caso de sus acciones en la aerolínea LAN, el sólo hecho de ser electo y tener que cumplir la promesa de venta de sus acciones, generó fuertes expectativas en la bolsa, lo cual derivó en un aumento exponencial del valor de sus acciones, que definitivamente ha dejado claro que el poder político y económico parecen influenciarse fuertemente bajo el control de una sola persona.

Los conflictos se dan a través de un sinnúmero de maneras, cuando una autoridad recibe el regalo de un promotor y recomienda un lucrativo contrato con la empresa de este.  Cuando un ejecutivo comercial oculta información que sería de impacto negativo para los bienes de una empresa con la intención de obtener mejores precios por las acciones.  Cuando un investigador farmacéutico, recibe el apoyo de una empresa farmacéutica para declarar que una nueva medicina es clínicamente efectiva.  Cuando un medico recomienda un tratamiento costoso solo para obtener un mejor pago del laboratorio o de su paciente.   Cuando un profesor recomienda la admisión de un estudiante o su graduación debido a que desea obtener los favores sexuales del estudiante.  Cuando un periodista crea una cortina de humo para desviar la orientación de un tema por el cual tiene intereses en ocultar. Existen en todos y cada uno de los campos y actividades humanas, influencian a abogados, contadores, ingenieros, consejeros, artistas, etc.

En teoría, una persona que aspira ser representante del estado, presidente, parlamentario, o autoridad oficial, no puede tener conflicto de intereses, o se es empresario o presidente pero en ningún caso ambos roles.  El Estado es quien mediante sus diversas instituciones regula el mercado y guía el desarrollo de un país, debe velar entonces porque los conflictos de intereses sean mínimos o nulos.

Los conflictos de interés apuntan al Estado….
Los conflictos de interés están presentes en la vida política. El tema de ellos es de una polémica abundante y no tiene sentido no reconocerlos.  Vivimos tiempos en que la mayoría de los conflictos de interés, terminan en el Estado, en el sector de la administración pública, para ello, una vez se originan, se acercan y nublan a las autoridades, en la búsqueda de las situaciones favorables.

Así tenemos “intereses personales” que afectan las decisiones de las autoridades, “intereses político partidarios” que son a veces y a todas luces contrarias y afectan la administración del sector público, “intereses institucionales ajenos” que influencian en su favor la balanza de decisiones del Estado, “intereses privados” (empresas) que terminan siendo favorecidas por el sector público y hasta “intereses ilegales” tratando de forzar la marcha del estado a su favor.. 

Las experiencias de otros países muestran claramente como tratar los conflictos de interés
Por ejemplo la Oficina encargada del Programa de Justicia de los Estados Unidos prohíbe tomar acción o decisión alguna, en cualquier tema particular, cuando exista relación o este involucrada la relación con una entidad en la que haya 1) interés propio, o interés financiero. 2) que haya intereses de la esposa, 3) de los menores hijos, 4) de socios, o 5) de cualquier organización en la que se haya servido como representante oficial, director, aval, fideicomisario, socio o empleado. O  6) con cualquier persona con la que uno se encuentre negociando o haciendo arreglos concernientes a un empleo o servicios futuros.

Adicionalmente, los estándares de conducta  prohíben el intervenir en acción o decisión en determinados asuntos particulares, en los que exista interés financiero no solo propio, sino también miembro de su casa o involucre a una persona con la que se “mantenga una relación cubierta”.  Esta relación cubierta incluye 1) personas con las que uno lleva a cabo negocios que no sean transacciones rutinarias, 2) personas que son miembros de su casa, 3) personas a las que su esposa, padres, niños dependientes, sirven o buscan servir como representantes oficiales, directores, avales, socios, agentes fiscales, consultantes, contratistas, o empleados; o 4) personas con las que Ud., haya servido, trabajado el último año, como representante oficial, director, aval, socio, agente fiscal, consultante, contratista, o empleado; y 5) con organizaciones en las que Ud., sea un participante activo. Estas reglas, están diseñadas a asegurar se mantenga la “apariencia de imparcialidad” en el desarrollo de los deberes oficiales.


¿Porque el conflicto de interés es tan común?
Los motivos son simples de entenderse, los conflictos surgen cuando:
  1. La autoridad designada a hacerlos cumplir no apunta al Bien común, se desvía,  incumple sus funciones  u opta por el llamado mal menor.
  2. Existe ausencia, deficiencia o ineficacia de las normas.

Lo justo es enjuiciar hechos y no intenciones. Es necesario para ello dar a quienes asumen cargos públicos el beneficio de su decencia comprobada. Y también castigar con rigurosidad la confianza traicionada en salvaguarda del “Bien Común”.


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