El olvido, 7 tipos de problemas comunes de memoria

Tomado de las publicaciones de salud de Harvard

De vez en cuando, es normal olvidar cosas y es normal el tornarse más olvidadizo a medida que uno tiene más edad. Pero, ¿cuánto olvido es tolerable y cuanto es demasiado? ¿Cómo puede Ud., saber si las fallas de su memoria se encuentran dentro del espectro de envejecimiento normal o si estas son un síntoma algo más serio?

Las personas sanas pueden experimentar pérdida de memoria o distorsión de la memoria a cualquier edad. Algunos de estos fallos de memoria se vuelven más pronunciados con la edad, pero - a menos que sean extremos y persistentes - no se consideran indicadores de la enfermedad de Alzheimer u otras enfermedades relacionadas al deterioro de memoria.

Siete problemas comunes de memoria

1. Transitoriedad

Esta es la tendencia a olvidar los hechos o acontecimientos en el tiempo. Es probable que usted olvide información después de aprenderla. Sin embargo, la memoria tiene un cualidad de “uso o de perdida”: que significa que los recuerdos que usamos frecuentemente tienen menos probabilidades de ser olvidados, los no usados, los perdemos. Aunque la transitoriedad pueda parecer un signo de debilidad de la memoria, científicos especializados en el cerebro lo consideran como algo beneficioso, ya que borra del cerebro los recuerdos no utilizados, dando paso a nuevos y más útiles.

2. Distracción

Este tipo de olvido se produce cuando uno mismo no presta la suficiente atención. Te olvidas donde acabas de poner el lapicero, porque simplemente no prestaste atención en donde lo colocaste. Quizás usted estaba pensando en otra cosa (o, tal vez, en nada en particular), por lo que su cerebro no codificó en ese momento, la información de forma segura. La distracción también implica el olvidarse de hacer algo en un momento determinado, como por ejemplo tomar un medicamento o mantener la hora de una cita.

3. Bloqueo

Ocurre cuando alguien le hace una pregunta y usted tiene la respuesta justo en la punta de la lengua – uno sabe que conoce la respuesta, se da cuenta, pero simplemente la respuesta no llega. Este es quizás el ejemplo más familiar de bloqueo, la incapacidad temporal para recuperar un recuerdo de la memoria. En muchos casos, la barrera es un recuerdo en la memoria similar a lo que uno está buscando, y hace que se recupere lo equivocado. Esta situación es tan molesta que no se puede pensar en el recuerdo que uno desee.

Los científicos creen que los bloqueos de memoria se tornan más comunes con la edad y que son responsables de las molestias en las personas mayores cuando no pueden recordar los nombres de otras personas. La investigación muestra que la gente es capaz de recuperar la mitad de los recuerdos bloqueados dentro de unos minutos.

4. Atribución errónea

La atribución errónea se produce cuando se recuerda algo solo en parte sin precisión, perdiéndose algún detalle, como el tiempo, o que personas participaron, o en que lugar ocurrió. Otro tipo de atribución errónea se produce cuando uno cree que un pensamiento que tenía era totalmente original de uno, cuando en realidad, se trata de algo que uno ha leído o escuchado antes, pero que ha olvidado si fue leído o escuchado. Este tipo de atribución errónea explica algunos casos de plagio no intencional, en la que un escritor hace pasar alguna información como si fuera original de el, cuando en realidad lo conoció en alguna parte.

Al igual que varios otros tipos de lapsus (vacíos) de memoria, la atribución errónea se vuelve más común con la edad. A medida que uno envejece, se retiene menos detalles en la adquisición de información, debido a que se tiene problemas para lograr mejor concentración o procesar la información rápidamente. Y a medida que uno envejece, los recuerdos también se hacen más lejanos . Entonces los viejos recuerdos son especialmente propensos a la atribución errónea.

5. Sugestionabilidad

La sugestionabilidad es la vulnerabilidad de nuestra memoria al poder de la sugestión – La información que uno aprende acerca de un suceso, después de los hechos,  se incorpora a la memoria de los hechos, a pesar de que no se hayan experimentado todos los detalles. Aunque se sabe poco acerca de cómo exactamente funciona la sugestión, esta influencia al cerebro, y nos hace pensar que son recuerdos reales.

6. Parcialidad

Incluso la más aguda memoria no es una  perfecta instantánea de la realidad. En su memoria, sus percepciones se filtran acorde a sus prejuicios personales – son influenciados por las experiencias, creencias, conocimientos previos, e incluso su estado de ánimo en ese momento. Nuestros prejuicios afectan nuestras  percepciones y experiencias cuando se codifican en el cerebro de cada uno. Y cuando uno recupera los recuerdos de la  memoria, el estado de ánimo y otros sesgos del momento pueden influir sobre la información que realmente se recuerda.

También las actitudes y las creencias preconcebidas de cada uno forman un sesgo en los recuerdos. No existe prácticamente investigación alguna sobre los mecanismos cerebrales detrás de los sesgos parciales de memoria o de cómo estos se vuelven más común con la edad.

7. Persistencia

La mayoría de la gente se preocupa al olvidar las cosas. En algunos casos las personas se atormentan por los recuerdos que les gustaría olvidar y que no pueden, porque persisten. La persistencia de recuerdos de eventos traumáticos, los sentimientos negativos y temores experimentados, es otro tipo de problema de la memoria. Algunos de estos recuerdos reflejan con precisión terribles acontecimientos , mientras que otros pueden son distorsiones negativas de la realidad.

Las personas que sufren de depresión son particularmente propensos a tener recuerdos persistentes y perturbadores. También lo sufren las personas con trastornos de estrés post-traumático (TEPT). El trastorno de estrés postraumático es el resultado de diferentes formas  de exposición traumática - por ejemplo, recuerdos de abuso sexual o de experiencias durante la guerra.  Son recuerdos persistentes, partes molestas de un evento traumático, elementos centrales de todo  trastorno de estrés post trauma.