lunes, 4 de agosto de 2014

Las “piedras navegantes” que se mueven por si solas en el Valle de la Muerte

Tomado de Science Alert
Por Becky Crew
Traducción Jorge Contreras
Durante más de un siglo, los investigadores no han podido explicar cómo se mueven grandes losas de piedra, aparentemente sin ninguna ayuda, a través de un lago seco en el valle de la muerte en Estados Unidos. En este artículo la explicación del misterio.

Situado sobre el noroeste del Valle de la Muerte en el desierto de Mojave al este de California, el lecho de lo que antiguamente fuera un lago, hoy seco y excepcionalmente plano y llamada
la “Playa de los rastros de caminos” (en inglés Racetrack Playa) mantiene un fenómeno peculiar. Decenas de grandes piedra de dolomita y sienita , con pesos de hasta 318 kilogramos, se mueven desplazándose a través del barro agrietado, dejando un surco cual suave  sendero detrás de sus recorridos.

Algunos de estos senderos se extienden la friolera de 250 metros. Con frecuencia forman una línea agradable, ligeramente curvada, pero a veces  forman una línea rígida, o con ángulos en zig-zag, lo que implica súbitos cambio en su recorrido hacia la derecha o izquierda. Estas "piedras navegantes", como han sido apodados, son tan comunes en el “Racetrack Playa”, que hacen que parezca como una pista de carreras muy gastada, de ahí que el nombre de Playa. (Playa también significa “lago seco”.)

Es obvio que estas piedras se mueven por los senderos, pero ¿cómo? Antes nadie lo sabía. Desde los 1900 los investigadores y observadores casuales estaban fascinados por las piedras y su desplazamiento y nadie podía explicar cómo se movían. Y este hecho se mantuvo por siglos sin explicación ni respuesta sobre como es que se producía, además, nadie ha visto jamás a las rocas moverse.

Según Marc Lallanilla de la organización LiveScience, mientras que las explicaciones de los menos informados incluían de todo, desde extraterrestres hasta campos magnéticos y hasta explicaciones bromistas pasadas ​​de moda, una teoría popular entre los investigadores fue que remolinos de polvo, que son fuertes y relativamente de larga duración en esta zona, empujaban las piedras a través de la playa. Sin embargo, esta teoría, y otras que surgieron, fueron refutadas.

Es en el año 2006, en que el científico planetario Ralph Lorenz del Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins de los EE.UU. comenzó a investigar las piedras navegantes. Llegó a la “Playa de los rastros de caminos” con un interés en el estudio de sus similitudes a un lago de hidrocarburos en Titán, la luna de Saturno, y se quedó hasta dar fin a este misterio de larga data.

Para su explicaciónn, lo único que necesitó fue una pequeña piedra, un poco de agua y un recipiente ordinario un taper (en inglés “Tupperware”). Lorenz puso una pequeña roca en el fondo del recipiente y lo llenó de unos pocos centímetros de agua. Luego coloco todo en el congelador.

La explicación de Marc Lanilla vino después:
"Después de poner el recipiente en el congelador, Lorenz, logró que un pequeño bloque de hielo se incruste debajo de la piedra. Al colocar la piedra con el hielo en una bandeja grande con agua y con arena en el fondo, lo único que tenía que hacer era soplar suavemente en la piedra para conseguir que esta se moviera a través del agua.

Y a medida que la piedra con el hielo se movía, dejaba un rastro en la arena en el fondo de la bandeja. Lorenz ideó su experimento inteligente mediante la investigación de la flotabilidad del hielo adherido a las  grandes rocas, que cuando encerradas en hielo, pueden moverse flotando tal como sucede en las playas y mareas en el Océano Ártico."

Los cálculos de Lorenz y sus colegas de las condiciones climáticas en Valle de la muerte durante los meses de invierno parecían apoyar su teoría. "Los cálculos muestran que, en este escenario, el hielo no produce ninguna fricción en el agua, por lo que las piedras son capaces de deslizarse con sólo una ligera brisa,"

Joseph Stromberg lo publicó en la revista Smithsonian. "Este equipo de investigadores sostiene que su modelo explica el movimiento mucho mejor que cualquier otra explicación, y que no requiere una gran velocidad del viento ni de masivas capas de hielo ".

Posteriormente publicaron su investigación en el American Journal of Physics.

Mientras que la evidencia es circunstancial, porque nadie ha visto realmente que suceda, la investigación de Lorenz sigue siendo la explicación más probable para las piedras de la navegación del Valle de la Muerte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario