En recientes reportaje de la BBC[1], del FBI[2][3], se asegura que en los últimos 20 años el crimen en Estados Unidos ha ido en descenso, añaden que las últimas cifras del FBI muestran una brusca caída en los dos últimos años a pesar de la crisis económica. Tanto en gobiernos demócratas como republicanos y en épocas de bonanza y de recesión, la delincuencia ha ido disminuyendo desde 1991.
Algunos aducen que el descenso del crimen se debe 1) al efecto Obama[4], 2) a la reducción de la demanda de crack[5], 3) a una actuación policial más inteligente[6], 4) Al seguimiento estadístico del crimen[7] , 5) la teoría sobre la ley de abortos legales[8], 6) el factor de más criminales entre rejas[9], 7) A menos violencia producto de la reducción de exposición de niños al plomo[10] , 8) A un descenso en cifras de la población en edad criminal[11], 9) Al impacto positivo de los videojuegos en los jóvenes[12], y 10) A la proliferación de los teléfonos con cámara[13].
Lo cierto es que el resultado de la disminución del crimen al interior de los Estados Unidos no es más que el resultado de la implementación del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (Homeland Security Department), que fue creado en el año 2002 con la finalidad de 1) prevenir de ataques terroristas , 2) reducir la vulnerabilidad de los Estados Unidos al terrorismo, 3) minimizar daños y asistir a la recuperación de ataques terroristas. Este departamento integró entre sus filas diversas agencias estatales y conjugó capacidades en las actividades de contraterrorismo, fronteras, inmigración, seguridad de comunicaciones e Internet (ciber seguridad) y comités de crisis en alerta, con respuestas y planes de recuperación . Estas actividades de control orientadas hacia el terrorismo, también han dejado sentir sus efectos al interior de los Estados Unidos, donde las actividades ilícitas se han reducido. Se esperaría aún mayores resultados en el 2012 debido a que este departamento en la actualidad contará con un presupuesto proyectado total de 57 billones de dólares.
En conclusión decisión política y presupuesto.
[4] Según Alfred Blumstein La elección de un presidente negro -dice el experto- puede haber servido de inspiración a cierto número de jóvenes también negros, normalmente envueltos en robos y homicidios. Según esta hipótesis el hecho de que un negro llegara a la presidencia motivó a algunos adolescentes afroestadounidenses a esforzarse más en los estudios.
[5] Según Alfred Blumstein se corrió la voz sobre los peligros del uso de esa droga y -también gracias a una actuación policial agresiva
[6] Según Joe Baeza, portavoz policial, se utilizó un protocolo por el que los conductores podían registrar sus matrículas en una base de datos policial. Entonces los patrulleros hacían redadas en los vehículos de noche para verificar su propiedad. Añade que también actuaron contra las redes de ladrones de autos e hicieron planes para educar a la población sobre prevención y dispositivos antirrobo.
[7] Según Joe Baeza, sostiene que gracias al empleo del software CompStat, un mapa del crimen, señala los puntos calientes de delincuencia en la ciudad. Entonces se envía equipos para reforzar y mantener estos lugares sin delitos.
[8] Según el economista Steven Levitt que dice que el acceso a los abortos legales -producto de una ley en 1973- implicó que menos mujeres pobres, solteras y jóvenes tuvieran hijos y evitó que los bebés no deseados en las décadas de los setenta y ochenta se convirtieran en adolescentes criminales en las décadas posteriores.
[9] Según John Conklin, sociólogo de la Universidad de Tufts, un factor significativo que hay tras de la reducción del crimen en los noventa es el hecho de que había más criminales entre rejas y por tanto sin capacidad para delinquir. En su libro "Por qué descienden las cifras del crimen" apunta que en los años 60 y 70 las sentencias eran más indulgentes, por lo que la delincuencia aumentó. Tras ese periodo se endurecieron las condenas y se construyeron más prisiones.
[10] Según Jessica Wolpaw Reyes señala que "incluso niveles de bajos a moderados de exposición pueden llevar a problemas de comportamiento, reducción del coeficiente intelectual, hiperactividad y a la delincuencia juvenil. Se puede asociar esa disminución en el plomo entre 1975 y 1985 a un menor registro de crímenes violentos 20 años después". Alrededor del 90% de los niños estadounidenses en los años setenta tenía niveles de plomo que hoy serían motivo de preocupación, asevera. Su investigación también halló una relación entre el momento en que las leyes estatales prohibían el plomo y las estadísticas delictivas.
[11] Después de que la tasa de natalidad alcanzara máximos entre 1957 y 1961, a finales de los setenta y principios de los ochenta, la proporción de hombres que tenían alrededor de veinte años (entre 17 y 24 aproximadamente) fue la más alta de la historia. A medida que pasó el tiempo, la proporción de población en "edad criminal" descendió.
[12] Según un estudio publicado en mayo sugiere que los videojuegos mantienen a los jóvenes fuera de las calles y así también lejos del crimen. Expertos del Centro para la Investigación Económica Europea, en Texas, aseguran que ese "efecto discapacitante" compensa más que de sobra cualquier impacto directo que el contenido de los juegos haya tenido en el fomento de comportamientos violentos en los niños.
[13] Según esta teoría, los teléfonos con cámara serian un freno tecnológico que hace que algunos criminales se lo piensen dos veces antes de poder ser incriminados en un video.
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