Hombre de características asiáticas,
aproximadamente de 40 años, conduciendo una 4x4 Hyundai i40 SUV gris oscura de
dos toneladas, valorizada en unas 28 mil Libras esterlinas y registrada en el
residencial barrio de Essex, atropelló aprisionando contra las barandas a
cuanta persona pudo (turistas en el puente que se tomaban fotos con fondo del
reloj “BigBen”) y que caminaban sobre la vereda del puente Westminister,
dejando a varias personas tiradas en el piso a su paso. Al menos una mujer
saltó al río por salvarse de ser atropellada.
El agresivo conductor luego estrelló la
camioneta contra el enrejado del edificio del Parlamento, sobrepasando a pie la
entrada, armado de dos puñales.
En el interior apuñaló mortalmente a
Keith Palmer, oficial de policía de Scotland Yard en el cuello y la cabeza, mientras otro
agente le dio muerte a disparos.
Cinco muertos, incluyendo al atacante,
tres civiles y un agente de policía, y veinte heridos, incluyendo tres agentes
de policía, un estudiante Francés y un turista Coreano son el resultado de este
violento y sorpresivo ataque ocurrido entre las
2.30 y 2.44 pm
Los hechos ocurrieron con múltiples
testigos que incluyen personas residentes, turistas, periodistas en el
parlamento y funcionarios públicos del parlamento que transitaban por el área.
Las ambulancias con socorro medico
comenzaron a llegar al lugar 4 minutos después de iniciado el ataque. Una buen
numero de testigos reportaron los hechos al numero 911 de emergencias.
Al interior del Parlamento, se cerraron
las puertas al acceso desde el exterior y posteriormente se suspendieron las
labores.
A las 9 pm, siete horas después del
ataque, Theresa May, primer ministro de gobierno ha declarado, dando a conocer
el inicio a una investigación contraterrorista, asegurando que el gobierno no
se amilana ante este hecho y que mantiene invariable la política londinense,
que no ha sido reconocido por ninguna facción terrorista, y que continua el
estado de seguridad en alerta severa, tildando a este incidente de “enfermo y
depravado”.
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