Un día después del sismo que afectó Irak
e Irán, cientos de victimas, heridos y damnificados nos alertan sobre las
necesidades ante este tipo de desastres de gran magnitud.
En Irán el sismo afecto la provincia de
Kermanshah, cercana a la frontera con Irak.
Al menos 450 personas fallecieron, 600
heridos y unos siete mil quedaron sin hogar el lunes por la noche, a causa del
terremoto de 7.3 grados en Irán.
Mas de 300 de las victimas vivían en el
condado de Sarpol-e Zahab de unos 85 mil
habitantes, ubicado a unas 15 millas de la frontera. (15 kilómetros) y de Qasr-e Shirin. La mayor destrucción ocurrió
en construcciones domesticas con ladrillos de tierra.
En Irak, el epicentro del sismo afecto la
región de Penjwin, ubicada en la provincia de Sulaymaniyah, región del
Kurdistan en la frontera con Irán, afectando las comunidades de Halabjah y
Khanaquin. Representantes de salud kurdos dieron a conocer nueve victimas
mortales y mas de 400 heridos. Como resultado del sismo, el área del distrito
de Darbandikhammas, fue la más afectada, donde se habría derrumbado el único
hospital existente.
Entre los mayores problemas como
resultado del sismo, están el numero de equipos de rescate, la necesidad de
proveer refugios para personas que se han quedado sin viviendas, seguidos de la
administración de la atención medica.
En las redes sociales diferentes hashtags
nos alertan sobre la necesidad de uniformizar la designación de los lugares basados
en los nombres de los distritos,
provincias y regiones/departamentos a fin de mejorar las comunicaciones por las
redes sociales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario