Argelia. Personal de Seguridad en tareas de limpieza en la Planta de Gas
atacada por terroristas.
Lunes, 21 de enero 2013. (AP Photo / Belghoul Anis)
Por la Prensa Asociada[1],
Publicado el 21 de enero de 2013
Contribuyeron con este reporte Gregory Katz, Jill Lawless y
Cassandra Vinograd en Londres y Greg Keller en París.
LONDRES (AP) – Según expertos, el mortífero ataque contra el
complejo de gas natural argelino servirá de poco para disuadir del atractivo lucro
que representa la exploración de fuentes de energía en el norte de África, Sin
embargo según los expertos, obligará
a las empresas a incrementar la seguridad ante los riesgos de operar en
regiones remotas como en el desierto, en este caso.
Las empresas de petróleo españolas, noruegos y británicas han
evacuado rápidamente sus trabajadores de las instalaciones de energía de
Argelia a raíz del bien coordinado plan de ataque y toma de rehenes con
resultados sangrientos.
Las empresas de energía se muestran reacias a discutir este
tema, y los expertos afirman que la recompensa financiera, el retorno de la
inversión, es demasiado alto como para espantar a empresas, como son la gigante
de gas BP y Statoil de Noruega.
Alison Lyall, una analista de seguridad del Grupo de Riesgo
Harnser en Norwich, Inglaterra, aseguró el lunes 21 de enero, que "Los
riesgos nunca van a ser mayores que los beneficios y recompensas de trabajar en
estos ambientes".
Lyall, autora de un reciente informe para la Comisión Europea, respecto a la
evaluación de los costos de seguridad, afirma que las empresas dedicadas a la
industria de exploración y producción, aún aquellas operando en zonas de riesgo,
simplemente le han prestado poca
atención a esta cuestión. "Existe una fuerte concepción cultural empresarial
que se enorgullece en tomar riesgos" afirmó. Y agregó "Puedo
demostrar que el porcentaje de costos dedicado a la seguridad en recursos y
activos de muy alto valor, es sorprendentemente bajo."
El asalto el pasado del miércoles 16 de enero en el complejo
de gas natural de Argelia en Ain Amenas por un grupo terrorista multinacional
de Al-Qaeda ilustra el peligro que representan el Magreb Islámico y sus
ramificaciones, que han acaparado las tensiones étnicas en Malí y la revolución
en Libia. A raíz de la violencia, las compañías energéticas tendrán que
estudiar las operaciones, perfeccionar posibles fallas y actualizar planes de
contingencia con información actualizada obtenida del reciente ataque por sorpresa.
Ian McCredie, ex vicepresidente de la seguridad corporativa
de Royal Dutch Shell, dijo que los riesgos era evidentes y que se habían
subestimado."Habrá que hacer una reevaluación", dijo McCredie, ahora
director general del Grupo de Investigación Forbes en Estados Unidos.
Nigel Inkster, un ex oficial de inteligencia británico que
dirige una unidad de análisis de riesgos en el Instituto Internacional de
Estudios Estratégicos de Londres, dijo que el incidente ha planteado
interrogantes tanto para las compañías petroleras, como para Argelia. "Los consejos directivos de las
compañías petroleras que buscan trabajo en Argelia va a convulsionar por esto,
y no están seguros de cómo proceder", dijo Inkster. "Se esta planteando
todo tipo de preocupaciones y acerca de todo tipo de actividad económica ...
(incluyendo) las minas de uranio en Níger, que desde ya son muy importantes
para la economía global".
Argelia ha tomado un rumbo firme contra los terroristas, ha
rechazado las ofertas de ayuda de Gran Bretaña, de los EE.UU. y de otros, y a
decidido por si sola dar una
respuesta típicamente dura e intransigente. BP y Statoil se vieron
obligados a confiar la vida de sus empleados a las fuerzas de seguridad
argelinas, y eso no va a cambiar - al menos inmediatamente. Argelia insiste en
que tiene el know-how para garantizar la seguridad de las plantas de energía.
Youcef Yousfi, el ministro de energía de Argelia, declaró el
domingo 20 de enero, para la agencia estatal de noticias APS. "No hay duda
en aceptar la protección de las fuerzas externas de seguridad. En primer
lugar, vamos a reforzar la
seguridad y nos apoyaremos en nuestros propios medios".
BP y Royal Dutch Shell, cuyos empleados en Nigeria han sido
víctimas de bandas de secuestradores y militantes (terroristas), no han hecho comentarios sobre las medidas de
seguridad en Argelia.
Ted Jones, el ejecutivo de operaciones de Northcott Global
en Londres, empresa especializada en soluciones de evacuación, señaló que las
compañías alarmadas por el ataque, están incrementando las medidas de seguridad física, pasando de operaciones
de seguridad sin armas a operaciones armadas y trasladando personal no esencial
a lugares más seguros. Agregó que “es común que las empresas caen en
complacencia tras un período de funcionamiento seguro, y cambian de rumbo
cuando algo terrible ocurra”. "De
repente algo tan terrible como este ataque ocurre y se dan cuenta de que están mucho más cerca del peligro ...
y hay una especie de respuesta de pánico, que es perfectamente natural",
dijo.
La industria de la energía no es un objetivo nuevo para los
terroristas. McCredie recordó que los cambios significativos en materia de
seguridad siguieron a los ataques terroristas en Arabia Saudita, que incluye el
incidente de toma de rehenes del 2004 en los campamentos petroleros de Khobar,
que culminaron con la muerte de 22 personas.
"Ha habido todo tipo de ataques en otros lugares,
Yemen, Siria, Iraq. Estos ataques no son comunes. Lo inusual acerca de éste ataque
es que fue una gran sorpresa. No debería haber sido", afirmó McCredie, Al-Qaeda
en el Magreb Islámico "ha estado haciendo estas amenazas durante mucho
tiempo y nadie pensó que tenía la capacidad de llevarlo a cabo". Sin embargo agrega, que hay límites para
lo que fuerzas de seguridad extra podrían hacer en la lucha contra los
terroristas.
"Ellos son móviles y en una enorme y vasta área, es muy,
muy difícil de vigilar con policías, y difícil de mantener bajo vigilancia, por lo que un pequeño
número de terroristas pueden tener el factor sorpresa", McCredie agregó, "Las fuerzas de seguridad no pueden
patrullar toda la zona."
No hay comentarios:
Publicar un comentario